Por: Jeidys Pérez .
NEYBA, RD.– Las lluvias registradas en la tarde de este viernes trajeron consigo la crecida del río Majagual y un reguero de sedimentos que afectó considerablemente la carretera y los caminos de acceso a la zona montañosa de Neiba, dejando a varias comunidades prácticamente incomunicadas.
El fenómeno, aunque esperado por agricultores y moradores que han sufrido los estragos de la sequía, también ha evidenciado una vez más la vulnerabilidad de las vías de comunicación en la región. Los caminos rurales y tramos carreteros se han tornado peligrosos e intransitables, afectando el traslado de personas, productos agrícolas y servicios básicos.
“Hasta que vuelva a llover” ha sido la expresión con la que los comunitarios describen la frágil situación de la infraestructura en esta parte de la provincia. Y es que, cada vez que cae un aguacero, la historia se repite: carreteras colapsadas, aislamiento de familias y pérdidas económicas.
Por ello, hacen un llamado urgente a las autoridades del Gobierno central, al Ministerio de Obras Públicas y a la Defensa Civil, para que movilicen equipos pesados y personal técnico que restablezcan la accesibilidad y garanticen la seguridad vial en la zona.
Esta intervención no solo es necesaria por el impacto inmediato de las lluvias, sino como parte de un plan sostenido de mantenimiento y mejoramiento de caminos vecinales, en beneficio de decenas de comunidades que dependen de ellos para su desarrollo.
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