Por Leonardo Plata
La crisis interna por la cual
está atravesando el partido del jacho prendido, que hace mucho tiempo luce
apagado, no ha sabido aprender de sus errores del pasado.
El partido más viejo de la República Dominicana,
y que le ha hecho sus aportes a la democracia, no ha podido mantenerse
dirigiendo los destinos del país por las rebatiñas internas, y por los malos
gobiernos que le han caracterizado, claro con raras excepciones.
Desde la llegada al país de
la comisión de perredeístas integrada por Ángel Miolán, Nicolás Silfa y Ramón
A. Castillo, para realizar actividades políticas públicas, en menos de una
semana, ya estos estas figuras habían caído en contradicciones, por lo que
terminaron cada cual por su lado.
Ni siquiera  su líder el Doctor José Francisco Peña Gómez,
pudo escaparse de las diabluras, el odio y el canibalismo político de algunos
de sus compañeros y las guerras internas, inclusive, cuando estuvo aquejado de
sus dolencias en el hospital memorial de Cleveland, desde allí los llamó grupo
de buitres, tildándolo de sacarlo de circulación por su enfermedad.
En 1973 el PRD se divide
nuevamente con la renuncia del profesor Bosch, quien renunció de ese partido, diciendo
que ya había cumplido su cometido; formando el Partido de la Liberación Dominicana
(PLD), y con ello el profesor Bosch se llevó a su nueva organización a la
mayoría de los notables e intelectuales del PRD.
E
l PRD, no ha sabido adaptarse
a los nuevos tiempos, piensan que están en los Doce años de Balaguer, piensan
que con el desorden, el caos y las rebatiñas son la única forma de protesta;
este partido se ha convertido en un fósil político.
Una organización donde no son
capaces de superar y lidiar las diferencias internas, carece de credibilidad,
se descalifica para dirigir los destinos del país.
Una organización política
donde no existe disciplina, prudencia, respeto, organización, visión, no puede
ni podrá jamás pretender alcanzar el poder, pues de conseguirlo, correríamos los
riesgos de convertirnos en un desastre social y económico y que han sido
derrotados desde el 2004, en cinco ocasiones por el PLD.
Es que el Doctor José Francisco
Peña Gomes, bien  interpretó las acciones
de los perredeístas, cuando dijo: “Que solo el PRD destruye al PRD:
La crisis actual que surgió,
luego de la convención en la que Miguel Vargas Maldonado e Hipólito Mejía
compitieron por la candidatura presidencial, es la décima división importante
en el viejo Partido Revolucionario Dominicano.
 
 
 
 
 
 
 
0 Comentarios